La captación de agua limpia superficial o subterránea requiere grandes inversiones en las estaciones de bombeo. No obstante, si tenemos en consideración el ciclo de vida medio de un sistema de bombeo, la partida de gastos energéticos para abastecer a los bloques de bombas es mayor. No olvidemos que, a lo largo de 10 años, el gasto energético supone casi el 85 % del coste global. El objetivo de la telegestión es reducir esta partida de gastos optimizando la captación de agua y haciendo que las bombas se activen durante los términos de facturación de energía más económicos.
El automatismo permite, además de optimizar la captación y bombeo, reducir los gastos operativos. Esto se consigue principalmente con el mantenimiento preventivo de las bombas de agua interviniendo en las activaciones y en las paradas y en la permutación de las bombas y registrando el número de activaciones y el tiempo de funcionamiento de cada bomba.
En lo que respecta a una estación de bombeo o captación de agua, la telegestión es la respuesta a otras problemáticas como la seguridad de la instalación (control de acceso) o la monitorización de la calidad del agua bombeada.